St. Anger  por Metallica

El octavo álbum de Metallica se lanzó en 2003, después de haber interpuesto numerosos problemas que surgieron durante las grabaciones del disco. Las grabaciones comenzaron en abril de 2001 y se completaron exactamente dos años después. El título del disco era St. Anger, y reflejaba completamente lo que sucedía en ese período con Metallica.

Los miembros de la banda Metallica vivían la mayor crisis en sus relaciones personales e interpersonales. El bajista Jason Newsted no participó en las grabaciones ya que sus relaciones con Hetfield y Ulrich se habían deteriorado, el productor del álbum Bob Rock tocó el bajo en algunas canciones, pero fue su última colaboración con la banda, una colaboración que había comenzado desde 1990, James Hetfield abandonó las grabaciones para ingresar en un centro de desintoxicación porque su situación era trágica, las relaciones de Hetfield y Ulrich también estaban tensas y en general nada parecía encajar. El sonido de St. Anger siguió las tendencias metal de esa época, es decir, el sonido del nu metal y del metal alternativo, algo que decepcionó a la mayoría de los seguidores de la banda, quienes les dieron la espalda y la destrucción ya se había completado. Musicalmente y sonoramente, el gran problema del álbum fue cómo sonaban los tambores de Lars Ulrich, cuyo sonido era seco y enterrado, mientras que la ausencia de solos limpios también causó impresión.

A pesar de lo anterior, St. Anger ha vendido alrededor de 6.000.000 copias en todo el mundo, mientras que durante el período de su lanzamiento alcanzó el No1 en muchos países. Sin embargo, Metallica comprendió el descontento de su público y las canciones de este disco raramente se encuentran en la lista de canciones de sus presentaciones en vivo.